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El tercer Toyota, “un desperdicio”
Ni agregar un tercer auto le garantizó al Toyota Gazoo Racing conseguir el viejo anhelo de ganar las 24 Horas de Le Mans y su manager general, Hisatake Murata, cree que “ha sido un desperdicio el coche número 9 ya que estaba apretando cuando no era necesario y fue golpeado por detrás”, en relación al ritmo de Nicolás Lapierre en el momento del incidente.
El abandono del tercer auto del equipo fue el golpe de gracia para las aspiraciones niponas. Luego de tocarse con el Manor #25 de LMP2 de Simon Trummer, Lapierre no pudo llegar a boxes para reparar el Toyota TS050 #9. Allí se decretó el abandono del vehículo que tripulaban además el argentino José María López y Yuji Kunimoto. “Si hubiese sobrevivido a todo eso, habría sido capaz de ganar”, analizó Murata de manera crítica.
Esta fue la primera vez desde 1999 que Toyota emplea tres autos para correr en la La Sarthe y tampoco ha sido la fórmula del éxito. La nueva frustración en Le Mans no provocó un cimbronazo en Toyota, aunque sí han sido autocríticos y sinceros.
