Fórmula 1
5 momentos mágicos de Ayrton Senna en la F1
A 29 años de su partida, repasamos cinco momentos del brasileño que quedaron para la historia.
Ayrton Senna dejó una huella imborrable en la F1. Por eso, a 29 años de su desaparición física, recordamos grandes actuaciones del piloto brasileño en la máxima categoría.
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Demostración con el Toleman en Mónaco
En el Gran Premio de Mónaco de 1984, Senna mostró de qué estaba hecho. Era su primera temporada en la F1, el brasileño largó 13º bajo la lluvia y con un Toleman llegó a liderar la carrera. Por la intensa lluvia, la prueba terminaría con bandera roja, con el clasificador de una vuelta anterior a la bandera a cuadros, así que el triunfo quedaría para Alain Prost y el segundo lugar para un sorprendente Ayrton Senna.
Su primera victoria
En el Gran Premio de Portugal de 1985, Ayrton Senna lograría su primera victoria en Estoril, también bajo la lluvia. Mientras los pilotos se quejaban de las condiciones y tenían despistes, Senna partió desde la pole y ganó con autoridad.
Una pole mágica
En la clasificación para el Gran Premio de Monaco de 1988, Senna completó una de las mejores performances. Incluso llegó a declarar que trascendió los límites de su consciencia y manejaba en otra dimensión. En la sesión cronometrada, Senna le sacó 1 segundo y 4 décimas a su escolta, Alain Prost.
Triunfo sufrido de local
Tras varios intentos recién en 1991 Ayrton Senna pudo ganar en su país. En aquella recordada carrera en Interlagos, el piloto de McLaren sufrió problemas con la caja de velocidades, que quedó trabada en sexta marcha. Su cuerpo lo sufrió y los síntomas se vieron al final de la bandera a cuadros, con calambres en todo el cuerpo. Hasta se le hacía difícil levantar la copa de ganador por la tremenda exigencia que tuvo ese día.
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Clase magistral en Donington Park
Ayrton Senna tuvo otra demostración de talento en Donington Park 1993. Aquel día brilló bajo la lluvia. Largó cuarto, y si bien perdió un lugar con Michael Schumacher en los primeros metros, el brasileño luego superó a Schumacher, a Wendlinger y más tarde dio cuenta de Damon Hill y Alain Prost para saltar a la punta en solo un giro. Luego dominaría la carrera para alcanzar la victoria en el circuito británico.
