Fórmula 1
Bar-Honda a 400 km/h, ¿ficción o realidad?
La Fórmula 1 siempre ha buscado los límites de la tecnología y a pesar de que los reglamentos siempre limitan el ingenio, algunas estructuras realizaron proyectos fuera de los circuitos, utilizando su Fórmula 1, con la intención de demostrar sus desarroolos o simplemente a modo de marketig.
Muchas veces se ve pruevas de autos corriendo contra aviones, o caballos, o competencia entre distintos modelos contra un F1, etc. Red Bull, Mercedes, Ferrari, entre otras escuderías lo han hecho.
Hace casi 15 años, el equipo Bar-Honda ideó uno de los proyectos de ingeniería más ambiciosos de la historia de la máxima categoría mundial.
Intentó superar la barrera de los 400 km/h con uno de los Fórmula 1 que estaban utilizando en aquel momento para competir.
Ese auto, que en la temporada 2005 habían utilizado Jenson Button y Takuma Sato, necesitó una puesta a punto específica a nivel de aerodinámica, ya que con la configuración habitual no podían alcanzar esa velocidad, salvo que doblaran la potencia del motor V10 de aquel entonces, algo realmente imposible.
Ese auto fue el último Honda con motor V10 y fue llevado a las salinas de Bonneville, en Utah, USA, y ver hasta qué velocidad podía llegar a lo largo de una milla en línea recta.
Alan Van der Merwe, quien actualmente conduce el aunto médico en la Fórmula 1 fue el piloto de ese BAR-Honda preparado para la ocasión.
El sudáfricano fue el encargado de intentar superar la barrera de los 400km/h, algo que con una puesta a punto para correr hubiese alcanzado los 370km/h de máxima.
Luego de varios intentos, lo consiguieron, alcanzando una velocidad máxima de 413,205 km/h en el desierto de Mojave.
Sin embargo, el día definitivo, en el que la Federación Internacional de Automovilismo hacía las mediciones, el proyecto no fue un éxito, ya que el Bar-Honda alcanzó solamente los 397,360 km/h por culpa del viento y aunque marcó un récord en intentos anteriores, esa fue la velocidad que está certificada por la FIA.
Intentar un récord en Bonneville, en lugar de un campo de aviación en el centro de Inglaterra, tuvo ventajas históricas y cinematográficas, pero la razón principal por la que los récords de velocidad terrestre se establecen en las salinas son los espacios abiertos. Las pistas clasificadas en Bonneville para intentos de velocidad en tierra son dos o tres veces más largas que las pistas más largas del mundo.
"No hay comentarios", recuerda Van der Merwe. “Estás rodeado de esta vasta blancura. La pista tenía 200 m de ancho y 11 millas de largo. La única forma en que sabes que vas rápido es porque te quitan el casco y el auto grita en séptima marcha.
“Pensamos que íbamos a necesitar algo así como tres millas de pista, pero debido al bajo agarre necesitábamos cinco millas solo para aumentar la velocidad, acelerar el acelerador, ser pacientes. Un pequeño giro de la rueda podría golpear 5-10 km / h sobre la milla cronometrada ".
Un registro de velocidad terrestre de la FIA requiere un paso sobre la milla o el kilómetro medido en ambas direcciones, promediando los resultados para sacar la ayuda del viento de la ecuación (de ahí que la velocidad máxima de 413.205 km / h establecida en Mojave no contara).
Casi 15 años después, el logro de Honda tiende a caer en la misma categoría de discusión que una demostración en vivo o un lanzamiento particularmente deslumbrante.
Fue algo soñado por un departamento de marketing, pero igualmente el logro técnico de llevar un automóvil F1 casi estándar a esas velocidades impensadas merece una gran cantidad de crédito.
No fue casualidad que nadie antes o después haya intentado lo mismo.