Bessone/Traverso 25 años de la batalla en Tucumán

Fue un domingo 6 de diciembre de 1992 y TC2000 definía un campeonato más. En un automovilismo argentino triste por la reciente desaparición de Roberto Mouras en el fatal accidente de Lobos 15 días antes, ponía su atención en esta etapa final de una categoría que estaba en su punto más álgido.

La cita era en San Miguel de Tucumán y el circuito el hermoso trazado "Nasif  Moisés Estéfano" ubicado en el Parque "9 de julio", en zona céntrica. Un circuito casi callejero rodeado de árboles y con un paisaje que reflejaba el auténtico "Jardín de la República".

Se esperaba una deficinicón más que tranquila ya que Tito Bessone con su Ford Sierra estaba  a nada de conseguir el tan ansiado campeonato. Un cuarto lugar lo pondrían por delante de su archi rival Juan María Traverso y su imbatible Fuego by Berta.

Recuerdo un fin de semana con mucho calor, un equipo Renault que tenía debajo del auto por suspención al Toto Etchegaray, que le había cedido su Fuego a Jorge Serafini y así sumar más escuderos que pudieran ayudar a un Traverso, que contaba con un auto, según Berta, siete u ocho puntos, con posibilidades de girar y esperar el milagro.

En lo previo, ni Traverso ni Bessone, habían clasificado bien, en cambio sus laderos si, como por ejemplo Luis Belloso y René Zanatta.

También recuerdo a un rapidísimo Silvio Oltra con el VW Carat de Maldonado que ya corría con el VW Gol.

La historia terminó con final feliz para el Rombo y su piloto insigna. Traverso lograba milagrosamente un nuevo título y Renault volvía a doblegar a sus rivales, ante una polémica generalizada.

Hubo algarabía en el equipo Renault, llanto en el equipo Ford. Fue por todo lo que sucedió en la última vuelta, en una insólita definición. 

Por suerte me tocó relatar aquella carrera histórica junto al colega Diego Zorrero para Radio El Mundo.

La cabinas estaban sobre los boxes por lo que se podía apreciar perfectamente lo que sucedía y con buena visibilidad sobre el circuito.

Bessone llegaba con una ventaja a Tucumán, lo que lo convertía en el favorito a llevarse el título, a pesar que en la fecha anterior de Concordia, Traverso, con un roce polémico en la curva 1 del circuito entrerriano y abandono del representante de Ford, descontaba puntos importantes que le permitían prolongar la definición a la última fecha.

En la previa, tanto Tito como Traverso, recibieron todo el afecto del multitudinario público tucumano, que se dividió en dos a la hora de alentar. 

Aquel Bessone vs. Traverso, Ford vs. Renault, se convirtió en un super clásico, era como un Boca /River.

La lluvia se hizo presente a la hora de largar  y todo parecía normal, con Bessone regulando la carrera. Todo calmo hasta que explotó el autódromo tucumano que se convirtió en asombro.  El Ford negro y blanco de Bessone estraba a los boxes, con una falla eléctrica. La humedad se apoderó del cable captor y  comenzó la desesperación del equipo por ver cuál era el problema que les hacía perder el campeonato.

“Tito” se bajó del Ford Sierra, que motorisaba Hugo Bini y era asistido por el Corto Román, apesadumbrado, decepcionado era llevado a la rastra por sus colaboradores el interior del box y luego a su casa rodante.

Mientras tanto, su equipo seguía intentando arreglar el auto. Hasta que en un momento la falla se fue y todos fueron presurosos a buscar al piloto, que volvió corriendo. Cuando estaba por entrar al auto, la falla volvió y de nuevo el piloto a su casilla. Minutos después el Sierra n° 5 arrancó.

Recuerdo como si fuera hoy que lo fueron a buscar, lo sacaron del motorhome, quizás ya contra su voluntad.

“Tito” no quería seguir, pero lo convencieron, y salió a pista.

En tanto Traverso, con su Fuego gris,  superaba rivales y Belloso le cedió la segunda ubicación lo que automáticamente lo transformaba otra vez en campeón.

Bessone finalmente volvió a pista en los últimos giros y recuerdo perfectamente que un pensamiento me vino a la mente y dije al aire:

"Bessone vuelve a la pista, espero que no sea lo que estoy imaginando"...

Fueron minutos de alta emoción. La gente a lo largo del circuito vivió una definición espectacular.

Si Traverso no terminaba la carrera, Tito era Campeón. Ambos llegaron a la curva Solís, y ante el asombro de todos, cuando el de Ramallo le iba a sacar una vuelta,  Tito lo apuntó como para sacarlo de pista, pero en su loca idea, se arrepintió y solo lo rozó.

Debo confesar que quedé paralizado ya que no podía creer lo que estaba viendo. Jamás pensaba que un deportista ejemplar como Bessone podría hacer algo así. 

Traverso se bajó del auto gritando, por lo que le tocó vivir y no tanto por el campeonato. Bessone se fue a su box en silencio y luego recién después de un buen tiempo dio sus explicaciones.

Al respecto los protagonistas con el correr de los años comentaron sobre aquella historia:

Tito Bessone:

"Eran tiempos de un TC2000 muy competitivo. Con Traverso teníamos un duelo aspero pero correcto en la pista. Algunas declaraciones polémicas como parte del juego pero nada más. La maniobra de Tucumán fue una maniobra provocada por una situación extra que no resiste justificación. Yo no salí a chocarlo a Traverso, volví a ver si podía pescar algún punto. Pero cuando lo veo al Flaco que viene para pasarme me agarró un momento de taradez, de locura, como quieran llamarlo. Por suerte me pude arrepentir. Me sentí muy mal. Pero finalmente apredí de aquel error y me sirvió para el futuro."

Bessone fue sancionado por la CDA del ACA con seis meses de suspensión que fueron redimibles por multa.

Por su parte Traverso también comentó aquel episodio:

"Con Bessone teníamos una relación difícil pero nos amanzamos con el tiempo. En aquel encontronazo de Tucumán no fue culpa de él, sino de su entorno. Yo siempre traté de rodearme de gente que me contenga, cuando corremos estamos al límite y a veces no podes pensar. A Tito le dieron manija. Por suerte reaccionó a tiempo y se arrepintió. Si él hubiese querido me sacaba de pista de una y chau. Me acuerdo que me vino a hablar, a disculparse y me dijo: "No corro más". Yo le dije olvidate, no pasa nada, ya fue. Tenés que seguir corriendo. Es más cuando me llamaron a declarar los CD me preguntaron por el choque y les dije: "Que choque? ni me tocó. Ustedes estaban mirando otra cosa".

Lo que pasó en Tucumán entre Traverso y Bessone fue una definición polémica, que es parte de la historia no solo del TC2000 sino de nuestro automovilismo.