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¿Cada cuánto tiempo se deberían reemplazar las luces de tu coche?
Según el portal atracción360, cerca del 50 por ciento de los accidentes ocurren en la noche, pese a que el número de conductores es considerablemente menor. Nuestra visión se reduce y nuestros reflejos también.
El elemento del auto que más nos ayudará en ese sentido, sin duda son los faros. Es importante que tomes en cuenta desde la calidad e intensidad de los focos, hasta el momento de cambiarlos.
Por lo general, sólo cambiamos los focos de nuestro coche cuando alguno deja de funcionar, pero ¿sabías que con el uso pierden hasta el 30 por ciento de su luminosidad?
Por ello es importante que aunque no estén quemados o dejen de funcionar, los reemplaces cada dos años o 50 mil kilómetros y así tendrás la misma calidad de luz para que veas bien y te vean en el camino.
Es importante que recuerdes que aunque veas que uno de los dos tiene más fallas que el otro, reemplaces al mismo tiempo los dos, debido a que en la mayoría de los casos, su uso es simétrico.
Antes de hacer cualquier cambio, es fundamental saber qué tipo de focos utiliza tu vehículo (incandescentes, halógeno, xenón o LED) para remplazarlos. En la mayoría de los casos tendrás que abrir el cofre para tener acceso a los faros o la cajuela para llegar a las luces traseras.
Deberás buscar los soportes que los mantienen fijos en su lugar y liberarlos, así como desconectar las clavijas de alimentación de corriente eléctrica.
Si antes de proponerte el cambio usaste las luces, espera por lo menos 10 minutos para que se enfríen. Por nada del mundo toques con los dedos el nuevo foco o se fundirá rápidamente. No le dejes todo el trabajo a los focos, procura mantener en todo momento las micas de los faros y calaveras limpias y libres de rayones, una capa de polvo o que estén opacas reduce su eficacia hasta en un 20 por ciento.
Ya lo sabes, si detectas que alguna de tus luces está apagada o parece que traes velas encendidas, no hagas caso omiso y cambia los focos inmediatamente y no olvides hacerlo por pares; ya que de no ser así, el nuevo foco iluminará más que el antiguo.
Un detalle como este, por simple que parezca, te puede salvar la vida.