Opinión
Canapino fuera de contexto
El Súper TC2000 vivió otro fin de semana caliente, esta vez fue en el trazado sanjuanino del El Villicum.
La atmósfera ya venía pesada desde la semana previa por la posible no presencia del campeón Matías Rossi, enredado por las interminables controversias y variables decretos que se han generado con la pandemia.
Fue un fin de semana cargado de tensiones, con varios cruces de denuncias y reclamos que convirtieron al recinto de la deportiva (CDA y sus comisarios) en un desfile peatonal.
En el plano estrictamente deportivo la carrera tuvo sus momentos de atracción y buenas intenciones.
Agustín Canapino llegó a San Juan entonado por la gran actuación en los “200km de Buenos Aires” que le permitieron recuperar la senda del campeonato y ponerse a tiro de Leonel Pernía, el rival a vencer a esta altura del torneo.
El “Titán” hizo lo que tenía que hacer, exprimir a fondo el muy buen Chevrolet Cruze que le entregó su equipo.
Hizo la Pole, y por los recargos en la carrera Clasificatoria largó retrasado, se recuperó y llegó ahí nomás de Rossi que desde atrás había saltado a la punta.
La carrera Clasificatoria parecía normal hasta que empezaron los reclamos que definieron la clasificación casi tres horas después de terminada la carrera.
Rossi fue sancionado por no respetar límites de pista, como decía el reglamento y que se habló en la reunión de pilotos, donde por todo el protocolo y cuidado, el piloto de Toyota no pudo estar presente.
También hubo varios pilotos sancionados por no respetar la velocidad de largada (incluído el mismo Rossi) y así terminaba un sábado para el olvido.
El domingo ya arrancó mal con la decisión, poco entendible, de Matías Rossi de no correr, molesto por considerar arbitraria la sanción impuesta por los Comisarios Deportivos.
La carrera final se corrió normalmente, sin inconvenientes en pista, con un Canapino que puso todo y cerró un domingo perfecto.
Como decimos siempre y nos gusta a los que sentimos pasión por el deporte motor, las carreras se definen en la pista y en la pista el que no dejó dudas fue Canapino, ganando en buena ley y manteniéndose al margen de un contexto cargado de susceptibilidades, reclamos y rencores.
