Dakar
¿Cuál es el futuro del Dakar en la Argentina?
La Argentina no es un país más en la historia del Dakar. Cuando en 2008 la organización francesa tuvo que cancelar la competencia ante las amenazas terroristas en África, muchos vaticinaron el final de la aventura que en 1979 había iniciado el intrépido Thierry Sabine por los desiertos. Una reunión del entonces ministro de Turismo de la Nación, Enrique Meyer, con el promotor David Eli en París sirvió para cambiar el escenario y traer la competencia más extrema del mundo a América del Sur.
En 2009 comenzó una relación que se mantuvo en el tiempo. Con cambios políticos en el país, hoy el Dakar celebra su aniversario 40 y el 10° año en nuestro continente y, por consiguiente, en la Argentina. “Para nosotros es un honor y un orgullo vivir por 10° año un Dakar en la Argentina, un país que tanto queremos”, confesó Etienne Lavigne, director general de la competencia, con lazos personales también en el país, ya que su hija estudió aquí.
Sin embargo, en las últimas semanas se alimentaron varias versiones que indicaban un alejamiento de la Argentina del Dakar. Para muchos, los caminos ya están agotados, los equipos exigen escenografías con dunas y arena, como en Chile y en Perú, y una vieja idea de la ASO (Amaury Sport Organisation), la empresa que organiza el Dakar, de diagramar una competencia a la vera de las costas del Pacífico, entre Chile y Ecuador.
En ese objetivo, es clave Perú, que este año tuvo un protagonismo singular, con una gran acción por parte de PromPerú y la promoción turística del vecino país, con excelentes campañas mediáticas y muchas facilidades para los periodistas extranjeros. Desde la partida, en Lima, hasta la llegada, en la Argentina.
Los que sostiene que la Argentina lentamente se aleja del Dakar subrayan la escasa presencia del ministro de Turismo de la Nación, Enrique Santos, que a diferencia del anterior titular de la cartera, prácticamente no acompaña con su presencia la prueba. De hecho, no estuvo en la partida, en Lima, Perú, no estuvo en la llegada en Córdoba (es cierto que ese fin de semana se desarrolló en España la Feria Fitur y allí sí participó Santos) y tampoco presenció los lanzamientos que ASO efectuó en París.
Ya los que participan de los entramados políticos a nivel nacional aseguran que el gran objetivo del Gobierno dentro del deporte motor es la llegada de la Fórmula 1. Y sostienen que el plazo es traer a la máxima categoría antes de las próximas elecciones presidenciales. Para ello, hay que acondicionar el autódromo Oscar y Juan Gálvez, de Buenos Aires, y pagara el canon por 5 años, unos 150 millones de dólares.
El Dakar es mucho más atractivo en términos comerciales. ASO mantiene un tarifario de 6 millones por la largada, 5 millones por el día de descanso y 4 millones por la llegada. Y dentro de esos números se negocian algunos servicios, como seguridad, transporte aéreo y demás detalles.
“Es cierto que aún no nos sentamos a hablar sobre el 2019”, aseguró a Clarín y a Carburando Fernando García Soria, subsecretario de Promoción Turística de la Nación y coordinador del Dakar en la Argentina. “Sólo por ahora nos reunimos con ASO para ajustar detalles operativos. De todas formas, estamos abiertos en recibir propuestas y captar mayor cantidad de eventos. En 2017 tuvimos un gran impacto. Pero no es sólo económico. Pretendemos tres resultados: la difusión de los distintos puntos del país por donde pasa la competencia, el impacto económico directo y afirmar la capacidad operativa de cada región para recibir eventos tan significantes como el Dakar”, explicó el funcionario. Sus palabras están avaladas por el pedido de los gobernadores, que quieren el paso de la caravana por sus tierras.
¿De qué depende el próximo recorrido del Dakar? Del supuesto regreso de Chile, ya que en marzo asumirá la presidencia del vecino país Sebastián Piñera, que cuando ya ocupó ese cargo fue proclive a recibir la competencia. De concretarse esa vuelta al desierto de Atacama, Argentina tendría la jornada de descanso, para luego cruzar la cordillera de los Andes nuevamente y poner punto final en Perú (extendió su vínculo con ASO por cuatro años, aunque depende d elos vaivenes políticos en ese país).
“Si la propuesta es interesante y nos cierra, como hasta el momento, obviamente que estamos dispuestos a continuar con el Dakar”, destacó el subsecretario, que apuesta al deporte motor: “Apoyamos, además del Dakar, la Ruta 40, el Enduro de Verano, MotoGP, el Mundial de Motocross, el Superbike, como también queremos participar del calendario del automovilismo nacional con las categorías nacionales, para que no coincidan disciplinas en puntos cercanos o con otras atracciones turísticas. Para eso vamos a colaborar con el ACA”, agregó García Soria.
Tras el podio en Córdoba, las reuniones se multiplicarán para definir el nuevo recorrido, que se anunciará a fines de marzo en París. Por lo pronto, cada uno atiende su juego para largar su propio Dakar...