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El auto más feo del mundo
Alfred Juliano creó en 1957 un auto que luego quedaría en la historia. No por el más veloz, ni por el más grande, sino que por el más feo del mundo, como lo catalogaron los amantes de los vehículos, en su momento.
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Juliano, se formó como sacerdote en Massachusetts, Estados Unidos, y además estudió diseño de automóviles, con el afán de crear el vehículo más seguro, para salvar vidas. Así nació Aurora. Todo arrancó con algunos ahorros, donaciones, un Buick 53 chocado y fibra de vidrio.
La presentación oficial fue en Nueva York, ese mismo día tuvo la primera falla mecánica. Como había estado parado cuatro años, el circuito del combustible se había tapado, sin embargo lo solucionó rápidamente y pudo llegar.
La idea de Juliano era hacer el auto más seguro, pero terminó siendo el más feo del mundo. Gastó 30.000 dólares, lo que era el doble que comprar un Cadillac nuevo en ese momento. Aunque, Aurora, al ser mostrada en sociedad aterró a todos.
El sacerdote murió en 1989, pero su creación lo había hecho mucho antes, ya que nadie le dio su apoyó y quedó abandonado en un taller. Después, el constructor ingles Andy Sauders lo restauró, quizás el mejor homenaje a un hombre que intentó salvar vidas y nadie lo tomó en serio.
Datos del auto
- 6.2 metros de largo
- Carrocería de fibra de vidrio y gomaespuma.
- Grandes cinturones de seguridad
- Jaula antivuelco
- Barra contra impactos laterales
- Columna de dirección plegable
