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El Citroën 2CV de Astérix
El primer concept-carruaje realizado por Citroën en su historia, todo un ejercicio de imaginación para reinterpretar dos iconos franceses, Astérix y el 2CV,
El iconico Citroën 2CV ha vuelto a escena.
Ahora se llama Le Char, el carruaje, aunque en francés también se puede traducir por el tanque, y es resultado de la colaboración entre los diseñadores de la marca francesa y los productores de la última película de Astérix y Obélix que se estrenará el 1 de febrero de 2023 en Francia.
Hasta ahora ninguna marca de automóviles había participado en alguna de las producciones de los galos más famosos del mundo desde que fueron llevados a la gran pantalla en 1967 y desde luego la iniciativa de Citroën no puede ser más original y divertida.
En la creación de Le Char los diseñadores de Citroën tuvieron en cuenta todas las necesidades del rodaje de la película, dando lugar a un vehículo que nunca antes se había creado en la marca. El diseño y la construcción del carruaje Citroën para Astérix y Obélix se consiguió realizar en solo tres meses.
El resultado es un concepto de carro sostenible, construido con madera reciclada, suspensiones neumáticas hechas de estómago de jabalí, techo corredizo, faros realizados con cascos galos reciclados cuya luz la proporcionan luciérnagas potenciadas con la poción mágica y ruedas hechas de escudos reciclados, que incorporan los galones de Citroën.
En una de las secuencias del film, cuando el ejército de César llega a China, hay un primer cartel publicitario a la entrada del país en el que se anuncia el mejor carruaje de la época: el 2CV, un increíble carro fabricado en la Galia, tirado por 2 caballos. Una sutil alusión al famoso anuncio publicitario de Citroën que se rodó sobre la Gran Muralla China.
La implicación de Citroën en el rodaje ha ido más allá de la realización de este curioso vehículo pues se han utilizado nada menos que 10 vehículos eléctricos durante la filmación de la película: tres ë-C4, tres C5 Aircross PHEV, dos ë-Spacetourer, un Ami y un ë-Jumpy. Además, Citroën también se encargó de la instalación y cobertura de las estaciones de carga para estos vehículos en los enclaves donde ha tenido lugar el rodaje, en Bry-sur-Marne y Bretigny-sur-Orge.
