Opinión
El Clásicos de los clásicos
El autódromo Oscár Cabalén tuvo un marco de público muy bueno. La categoría es local en una plaza que siempre se hace fuerte.
Desde el viernes se notaba que el marco de público en el autódromo de Alta Gracia podía ser muy bueno el día domingo. Y esa sensación que estaba dando vueltas se hizo realidad. La cantidad de gente que acompaño al TC 2000 fue excelente. Con los primeros rayos de luz comenzaron a entrar los primeros simpatizantes.
El primer parámetro firme que marca que habrá muchos espectadores es cuando se baja al acceso que nos deposita al circuito y la cola de autos va más allá de lo normal.
Una vez más los cordobeses demostraron que son fierreros y que responden cuando hay carreras en el autódromo de Alta Gracia. El acompañamiento hacia el TC 2000 viene desde mucho tiempo atrás.
Durante toda la mañana dominguera los espectadores tuvieron mucha actividad en pista y eso está bueno porque se evitan los baches que la gente quiere tener. Para quienes fueron a la zona de boxes se encontraron con muchas actividades. En el patio había entretenimientos para chicos, patio de comidas y empresas que mostraban sus productos. Un extra más que recibieron aquellos que pagaron su ticket a esa zona.
Miles de espectadores se acercaron a Alta Gracia y eso en motivo de agradecimiento. La familia fierrera estuvo presente y si bien no vieron un buen espectáculo en pista, los aplausos dirigidos a todos los protagonistas que lo intentaron se escucharon a lo largo de la jornada.
No hay dudas que para el TC 2000 Alta Gracia es el clásico de los clásicos y eso es gracias al público que sigue respondiendo por este automovilismo deportivo.
