TC2000 Series
“La esperanza nunca la perdimos”
En la semana, entrevistado por este medio, el mendocino decía que “Sabemos que somos los más complicados pero el auto viene siendo muy competitivo y eso me tranquilidad que podemos pelearla”, y reconocía que “no hay que bajar los brazos nunca hasta el momento que caiga la bandera a cuadros. A Concepción voy a ganar y a esperar que se den las cosas. No me voy a rendir”. Y no se rindió.
Hace unos días decías que ibas a la pesca, porque no tenías muchas chance. ¿Qué pensás ahora?
-Es un sueño. Lo que dije en esa nota era lo que sentía, no me veía con chances más allá de que la matemática me diera esperanzas. Eramos los más complicados y veníamos con expectativas, pero bajas. La esperanza nunca la perdimos y no bajamos los brazos.
¿Qué te hizo pensar que se podía?
-La confianza me la dio el equipo con el auto que me entregaron. No me quedaba otra que hacer la pole, avanzar en el sprint lo más que se podía y ganar esta carrera. Y ver que hacían los demás candidatos, que eran los que estaban más firmes.
¿Qué te deja este campeonato además del título?
-Que la esperanza es lo último que se pierde. Y esto lo demuestra el automovilismo como muchas cosas que me ha demostrado en la vida. Es una cosa de locos. No hay que bajar los brazos hasta que se baje la bandera a cuadros.
¿Dudaste alguna vez de que ibas a hacer bien tu parte?
-No, nunca. Estaba lleno de confianza y eso me ayudó a tenerme mucha fe. Estaba tranquilo de que teniendo un auto competitivo podía pelear hasta el final.
¿Para quién va esta victoria y este título?
-Para mi hermano, para mi familia que está acá y para todo el equipo. Para todos los que me ayudaron desde que arranqué hasta el día de hoy a estar donde estamos.
