TC2000
"Le doy las iniciales: Silvio Oltra"
Hace exactamente 30 años el automovilismo argentino vivía en el autódromo de Buenos Aires una de las jornadas qu perduran en la memoria de quienes amamos este deporte y disfrutamos de las carreras de automóviles.
TC2000 cerraba su octaba temporada en el "Gálvez" ante una multitud que iba a ver el gran duelo entre los máximos referentes de la categoría por aquellos tiempos. El "Flaco" Traverso con la Fuego de Renault y "Tito" Bessone con la coupé Sierra de Ford.
Nadie por entonces se acordaba del tercero en discordia, una tal Silvio Oltra. El "cantautor", como se lo conocía al piloto de Olivos por su admiración por la música, había arrancado aquella temporada de 1987 ganador en Bs. As. y merced a una gran coupe Fuego motorizada por Berta y atendida por Rubén Benavidez se eregía como el defensor de los pilotos particulares metiendose como cuña en la gran definición.
Recuerdo que en los pasacalles que adornaban la Capital de la Argentina, estaban sobre la avenida Gral. Paz en su gran mayoría, hablaban del duelo Traverso, Bessone, la gran definición. Pero ni siquiera mencionaban al querido Silvio, en otras palabras lo ningunearon.
Eran mis comienzos en la radio y se nos encargó hacer una encuesta entre pilotos, dirigentes, periodistas, y personajes del ambiente sobre quien iba a ser el monarca del TC000 de 1987.
Por amplia mayoría Traverso y un poco más atrás Bessone dominaban el escrutinio casero y solo un queriso personaje que despachaba combustible, entre otras cosas, en el auttódromo, el Tío Dionisio, me respondió textualmente en el grabador. "Le voy a dar las iniciales: Silvio Oltra".
Y fue el único de casi un centenar de personajes que la embocó.
Tal como él mismo se lo había propuesto y anunciado obstinadamente, el único piloto privado, de los tres aspirantes al cetro 1987 del TC2000, no se conformó con darles un plausible susto a sus dos empinados rivales, representantes oficiales de ambas marcas en pugna. Así, pese a la desventaja matemática con que además encaraba la batalla decisiva, de inmediato Silvio se erigió en carrera en el hombre a batir, mientras sus dos "colosales" adversarios terminaron disputando el mero ingreso en el marcador puntable, traicionados que fueron asimismo por las controvertidas gomas, al igual que el Loco Di Palma.
"Cocho" López, magnífico y disciplinado escolta, seguido de un meritorio Carlos Crocco con el mejor Sierra al final, ante una delirante multitud que abarrotó el "Coliseo" porteño.
Nadie hubiera podido imaginar un final con tamaño suspenso y con tantos protagonistas ya que no eran sólo los tres aspirantes a la corona quienes definían, sino que se agregaron varios "convidados" como el "Loco", Mario Gayraud, Jose Luis Bessone, Carlitos Crocco y algunos más, de cuya acción dependía quien se iba a ceñir la corona de Campeón 1987 de TC2000.
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Traverso, Bessone y Oltra, los mencionados en el orden que tenían en el Campeonato hasta el inicio de esta competencia, se habían preparado quizá como nunca para este final. Los tres habían probado hasta el cansancio sus autos en el circuito número 9, buscando una puesta a punto que les permitiese ir rápido, y al mismo tiempo lograr la confiabilidad necesaria para no arriesgar más allá de sus posibilidades reales.
La carrera se puso en marcha y todos salieron a jugar su chance. Los del título y los "convidados". Traverso y Oltra tratan de escaparse, pero Bessone no quiere permitirlo. "Cocho" lo corre a Tito en la entrada del cajón en la primera vuelta y Di Palma avanza desde atrás para entrar también en juego. Sobrevienen "caricias", cuidadas de cuerda, barridas de pista, roces y demás yerbas, todo al filo del reglamento. Cuando Juan María hizo la punta trató de hacer lenta la carrera, girando más de cuatro segundos por encima del tiempo de clasificación, y de esa manera "los juntó" a todos detrás de él. Cuando Oltra pasó a la vanguardia impuso otro ritmo más veloz, y Di Palma se fue con él para no dejarlo "dibujar" tranquilo. Más roces y Luis debe ir a boxes con una llanta rota como consecuencia de los mismos. Cuando vuelve a salir lo espera a Silvio en pista y recomienza "la tarea" de mostrar y poner el auto por todos lados. Silvio no se inquieta, si bien se ve forzado a concentrarse totalmente y a cambiar el ritmo. Hace más lenta la carrera y obliga a Di Palma a irse adelante.
Cuando Oltra logró ese objetivo comenzó el acercamiento de Gayraud hacia la punta. También el de "Cocho" y el de Crocco. De ninguna manera había paz. En el giro 22 Mario Gayraud se puso a 2s80/100 y luego debió aflojar su ritmo porque no llegaba con las gomas al final. Tres vueltas más adelante era "Cocho" el que tomaba la posta y presionaba a Silvio. Una vuelta más y se puso a su cola. Allí aparecieron las manos hacia abajo en el box de Osvaldo Antelo y "Cocho" acato la orden. La cúpula de Renault había determinado, con el pulgar hacia arriba, que la corona fuera para Silvio Oltra. El mejor particular de la marca a lo largo del año.
Un hermoso recuerdo de aquella extraordinaria definición que no hace más que reflejar la frase del Maestro Juan Manuel Fangio cuando dijo: "la carrera se termina cuando bajan la bandera a cuadros".
Este fin de semana STC2000 esta ante otra definición apasionante. El Facu Ardusso es el gran candidato, Mariano Werner el retador, Matías Rossi la sorpresa y Agustín Canapino el "batacazo".
Cualquier cosa puede pasar en Alta Gracia, ojala sea una definición limpia, transparente y que los que tenemos la responsabilidad de contárselo por los distinos medios podamos disfrutar, sentir y emocionarnos con esta última carrera del año.
