Lamborghini sostiene su bandera de marca creadora de grandes deportivos y autos extravagantes. Lo último del fabricante italiano no es nada convencional y a más de uno le habrá costado adivinar de qué se trata exactamente. En efecto Lamborghini marca ha tomado dos de sus productos estrella y los ha fusionado dando lugar a un concept muy especial, que es una mezcla de supercar y todoterreno, pudiendo adaptarse tanto a las rutas como a los terrenos alejados de ella.
Utilizando la base del
Huracán Evo, este Lamborghini Huracán Sterrato es un prototipo que imagina un automóvil de altas prestaciones que se ha visto influenciado por las aptitudes off-road del
Urus, ofreciendo al conductor un producto con el que poder disfrutar del placer de conducción sin preocuparte a dañar la parte baja del auto o quedar encajado tras desviarse del asfalto. Para ello, los ingenieros de la marca han modificado la suspensión para elevar la distancia libre al suelo en 47 milímetros, además de mejorar el ángulo de ataque en un 1% y el de salida en un 6,5%.
La casa de Sant’Agata Bolognese también ha ensanchado las vías del automóvil en 30 milímetros, introduciendo unas llantas de 20 pulgadas que van asociadas a unos neumáticos especialmente diseñados, con unos flancos laterales más altos que mejoran el agarre y la absorción de impactos. Además, el modelo cuenta con unos pasaruedas más prominentes (remaches incluidos), refuerzos en la parte inferior de la carrocería y unas placas protectoras tanto en la parte delantera como en la trasera, así como unos estribos reforzados con aluminio.
Los ingenieros de Lamborghini han introducido una serie de protecciones en la carrocería para tratar de desviar las piedras y otros objetos peligrosos de las tomas de aire y el motor, junto a unos guardabarros fabricados en materiales híbridos como la fibra de carbono y resina elastomérica. Conducir por la noche tampoco será un problema y es que este prototipo cuenta con unas luces LED adicionales tanto en el paragolpes delantero como en el techo.
En el interior del vehículo también se han realizado cambios significativos, comenzando con unos paneles del suelo en aluminio y unos asientos deportivos de carbono con cinturones de cuatro puntos, y terminando con una jaula antivuelco fabricada en titanio.
La potencia procede del mismo V10 atmosférico de 5.2 litros que tiene el Huracán Evo, es decir, un motor que entrega 640 caballos y un par máximo de 600 Nm. Toda esa energía se transmite a las cuatro ruedas a través de una caja de cambios automática de doble embrague y siete relaciones, con un sistema de tracción que ha sido modificado para la ocasión, como también ha ocurrido con la dirección en las cuatro ruedas, el reparto del par vectorial y las ayudas electrónicas. Todo ello está dirigido por el denominado LDVI (Lamborghini Dinamica Veicolo Integrata), calibrado especialmente para conducir fuera de la ruta, enviando un mayor empuje a las ruedas traseras para mejorar tanto la tracción como la aceleración en terrenos complicados.
