Fórmula 1
Los campeones de la F1 que se consagraron en el GP de Japón
Tras la consagración de Max Verstappen, recordamos los otros 12 pilotos de la máxima categoría que gritaron campeón en tierras japonesas.
El holandés Max Verstappen se sumó a la lista de pilotos de Fórmula 1 que se consagraron campeones del mundo en el Gran Premio de Japón.
Anteriormente, en 12 oportunidades había ocurrido que un piloto de la máxima categoría consiga su tan ansiado título en el circuito japonés.
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El primero de ellos fue el británico James Hunt en la temporada 1976. Pero luego, tras nueve años de ausencia en el calendario, el brasileño Nelson Piquet se consagraría nuevamente en 1987. Su compatriota Ayrton Senna repetiría la hazaña un año más tarde y levantaría el título en territorio japonés.
En las temporadas 1989 y 1990, Alain Prost y Ayrton Senna serian protagonistas de una de las definiciones más escandalosas de la máxima. La extrema rivalidad que tenían el francés y el brasileño los llevo a que durante la carrera se lleven todos los focos de atención debido a los accidentes que protagonizaron y que dejaron una marca en la historia de la categoría.
En la definición del 89’, Prost y Senna chocaron sus dos monoplazas durante la carrera. Con los dos autos fuera de competencia, el francés se consagraba campeón del mundo, pero el brasileño siguió en carrera y la terminó ganando. Pero finalmente la FIA descalificó a Senna y le dio el título a Prost.
Un año después, en la definición del 90’, ocurriría un episodio similar, pero a la inversa. Ayrton cobró venganza tras lo sucedido en la temporada anterior y choco de manera intencional a Alain en la primera curva del circuito, quedando los dos fuera de carrera. Debido a los números, esto llevó a que el brasileño se consagre bicampeón de la F1.
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En la 1991, el título quedaría nuevamente en manos de Senna. Mientras que, en las definiciones de 1996, 1998 y 1999, los campeones de la máxima fueron el británico Damon Hill en la primera de ellas y el finlandés Mika Hakkinen en las últimas dos.
En el comienzo del siglo XXI, en las temporadas 2000, 2003 y 2011, los campeonatos del mundo de la Fórmula 1 quedaron en manos de uno de los dos pilotos más ganadores de la máxima categoría, el alemán Michael Schumacher. Mientras que el último que gritó campeón en Japón fue su compatriota, Sebastian Vettel.