Turismo Carretera
Merecido reconocimiento a Roberto Mouras en Balcarce
Tenía 44 años el Toro de Carlos Casares cuando murió el 22 de noviembre de 1992 en la pista. Ídolo de Chevrolet, fue campeón tres veces con Dodge.
Luego de cumplirse dos décadas de su fallecimiento, desde el Club Leones y la Fundación Fangio impulsaron la colocación de una baldosa en la Galería de Los Campeones, lugar especial destinado a las grandes figuras que entregó el automovilismo argentino.
El vínculo Mouras – Museo Fangio fue especial, el mismo día que llegaba, por pedido de Roberto el auto que él había entregado a Balcarce, sucedía su accidente fatal.
Deportivamente, lo que ocurrió con Mouras fue algo inédito en la historia del TC. Mouras ganó los campeonatos de 1983, 1984 y 1985, todos con Dodge, preparados por la dupla Omar Wilke y Jorge Pedersoli.
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Pero Mouras, nacido en plena cuenca lechera bonaerense, en Moctezuma, muy cerca de Carlos Casares el 16 de febrero de 1948, quería ser campeón con Chevrolet.
La idolatría que la hinchada de Chivo le rindió nació en 1976, cuando el equipo oficial Ford dominaba en el TC con Luis Gradassi y un joven Juan María Traverso. Mouras ganó seis carreras seguidas con el 7 de Oro, así era llamada la cupé Chevy por el número que llevaba en las puertas y el color dorado de una marca de whisky que lo auspiciaba.
Por todo eso y mucho más, desde la Fundación Fangio se determinó que uno de los pilotos reconocidos en Balcarce sea Mouras. El descubrimiento, se consolidó en el marco de la Fiesta del Automovilismo y estuvieron en dicho reconocimiento, su esposa Alicia Socci y su hija Natalia.