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Paciencia para viajar con la mayor seguridad vial posible
El fin de semana extra largo, entre Semana Santa y el feriado del 2 de abril, invita a viajar. Es por ello que en las últimas horas se advierte un incremento notable del flujo vehicular en varios puntos del país, principalmente en los accesos de la Ciudad de Buenos Aires, que por momentos colapsan ante la salida de turistas. ¿Qué aspectos hay que tener en cuenta para lograr un viaje seguro?
Principalmente, la actitud. Es fundamental tomar el viaje como parte de las mini vacaciones y armarse de paciencia si las rutas están colapsadas. La conquista de ganancia de tiempo en tramos que terminan siendo insignificantes conllevan a la imprudencia y como consecuencia se eleva la probabilidad de protagonizar un incidente vial.
Aunque parezca redundante, siempre es bueno repasar los principales tips para gozar de un viaje seguro. Mantener el carril, no usar la banquina y anunciar las maniobras (guiño para el viraje o balizas en caso de detención). En caso de fatiga o cansancio, parar. Cada 200 kilómetros o dos horas aproximadamente, detenerse para cambiar la postura, estirar las piernas o refrescarse.
Para evitar la fatiga, hay que descansar previo al viaje. Lo aconsejable es dormir al menos 8 horas antes de partir y en lo posible evitar manejar de noche, ya que la visibilidad disminuye considerablemente.
Siempre es beneficioso conocer el camino con la lectura previa de un mapa o la utilización de un GPS.
Si bebiste alcohol, no conduzcas.
Todos los integrantes del vehículo deben llevar puesto su cinturón de seguridad. Los niños deben viajar siempre atrás y con las sillitas correspondientes teniendo en cuenta que hasta los 9 kilos la silla es del tipo cuna y se ubica en sentido de contramarcha. De 9 a 15 kilos debe llevar una sillita de seguridad en el sentido de la marcha. En el caso de superar los 15 kilos, se debe utilizar una silla amoldadora que ajuste las medidas del niño a las de un adulto común, con el fin de que pueda usar los cinturones del propio vehículo.
También es importante llevar los elementos sueltos (bolsos, botellas, notebooks, etc) en el baúl, ya que ante una frenada brusca o un incidente pueden originar lesiones si están dentro del habitáculo.
En caso de algún inconveniente que requiera la detención del vehículo, colocar las balizas a 75 metros y a 150 metros. Una buena señalización disminuye notablemente la probabilidad de incidentes.
Es fundamental utilizar un calzado bien cómodo, como un par de zapatillas. No utilizar ojotas o sandalias, ya que pueden engancharse con algún pedal.
Para la circulación hay que llevar la siguiente documentación:
Registro de conducir vigente al momento del control.
Documento Nacional de Identidad.
Cédula verde del auto.
Cédula azul si conduce un vehículo que no es de su propiedad y la cédula verde se encuentra vencida.
Seguro del vehículo.
Última patente paga.
Verificación Técnica Vehicular o revisión técnica si el vehículo está radicado en una jurisdicción que lo exija.
Cédula amarilla en caso de vehículos equipados con GNC.
Además el vehículo debe contar con un juego de dos balizas reflectivas triangulares rojas, un extintor de un kilogramo para los automóviles (debe situarse al alcance del conductor dentro del habitáculo y bien sujeto), y como opcionales un botiquín de primeros auxilios, un chaleco amarillo reflectivo.
