Opinión
Pernía-Rossi: ¿cómo será la pelea mano a mano?
Los dos llegan a Neuquén para protagonizar quizá la mejor definición de campeonato de la era Súper TC2000. ¿Quién estará más fuerte?
Promete ser la mejor definición de campeonato en la era del Súper TC2000. Muchos factores se conjugarán para que en Centenario tengamos la posibilidad de vivir un final de temporada muy apretado y con una última carrera de la que surgirá el consagrado. En otro momento se analizará cómo fue el año de la categoría, y cómo a pesar de algunos altibajos, llegó al Coronación con un altísimo grado de expectativa y con una marcada paridad entre los dos equipos que mejor se adaptaron a la transición de 2019 con los novedosos motores turbo que se incorporaron desde este año.
Leonel Pernía llega a la definición con el angustiante peso de tener cinco subcampeonatos encima y la chance de poder contar, por fin, con el respaldo declarado de su equipo en busca del objetivo entre los pilotos. Renault Sport ganó en la fecha pasada el campeonato de equipos de manera anticipada.
Matías Rossi, por el contrario, contó desde el inicio con el respaldo absoluto del equipo para salir a buscar un nuevo campeonato que sería el quinto en la cosecha personal del piloto de 35 años. Julián Santero en las primeras fechas pedía permiso para saber que tenía que hacer detrás de Rossi, y siempre lo cuidó. Como también hizo en la medida de lo que pudo, su nuevo compañero desde mitad de año, Mariano Altuna.
Sabiendo que los dos contrincantes tendrán pleno respaldo de sus compañeros en pista y en el equipo, vale preguntarse ¿cómo será la pelea mano a mano?
Pernía tiene un auto con rendimiento superlativo y en las dos última fechas fueron casi apabullantes. Los 200km de Buenos Aires y Río Cuarto no dejaron dudas acerca del rendimiento de los Fluence y en particular los de Pernia y Ardusso.
"Así se nos va a complicar en la pelea" dijo Rossi después del rendimiento del Corolla en la fecha pasada y por eso el equipo probó antes de viajar a Neuquén. Es indispensable una mejore en el auto para pelear de igual a igual, y los ingenieros de Toyora terminaron muy conformes con el test de los autos de Santero y Rossi en Rafaela.
En la pista puede pasar cualquier cosa, y la gran incógnita será saber si Toyota recuperó el nivel de mitad de temporada para hacerle frente a los Renault. Eso se sabrá desde los entrenamientos y en especial con la clasificación, que según antecedentes, será muy importante para el devenir de la carrera.
Tratándose de una definición de campeonato con dos pilotos muy cercanos en los puntos y cinco más jugando en la pista para sus compañeros, si bien la clasificación es importante, lo que definirá todo será la Final. Y en ella el comportamiento de los autos rivales, de los dos pilotos enfrentados y de los que jugarán para uno y otro.
No será un a carrera más y no se la debe analizar como tal, sino como verdadera una definición de campeonato, con varios actores en el escenario jugando para dos.
Si se consagrara Pernía, no será sólo por el resultado del domingo, que es decisivo obviamente. Lo será también por los 39 puntos de diferencia que le hizo a Rossi en las dos primeras fechas en donde ganó en Alta Gracia y General Roca. Si lo llegara a perder, será por los 41 puntos que cedió frente a Rossi, cuando éste ganó tres Finales seguidas a mitad de año (Paraná, Salta y San Nicolás) y fue 2º en la restante (San Juan).
Para Rossi lo mismo. Perdió mucho en el arranque y lo recuperó en mitad de campeonato. Se desinfló en las dos últimas en las cuales Pernía sumó 50 puntos contra 29 de Rossi. Y eso que Ardusso le quitó a Pernía 5 puntos más en la clasificación de los 200km de Buenos Aires...
Los dos tienen suficientes merecimientos para ser campeón. Por manejo, por rendimiento en situaciones difíciles, por contundencia. Tanto Pernía como Rossi merecen estar en el lugar que están y cualquiera, de ser campeón será un justo ganador. Pero en este deporte los merecimientos no tienen puntos, ni premios. Lo que cuenta es la posición final y la resistencia con el auto.
Las ventajas que cada uno tenga a su favor se verán diluídas en el fragor de una definición que puede llegar a ser la mejor de los años del Súper TC2000.