Opinión
Respeto y admiración por aquellos pioneros
Un día como hoy, hace 82 años se produjo el debut en una pista de carreras del máximo campeón del automovilismo de nuestro país a nivel mundial. El domingo 25 de octubre de 1936, en un circuito con forma de triángulo con calles anchas y mucha tierra suelta corrió por primera vez Juan Manuel Fangio, aunque bajo un suedónimo para que su presencia pasara inadvertida. Esa competencia, que había sido programada para dos semanas antes pero tuvo que ser postergada por lluvias, fue una de las primeras carreras de autos realizadas en el sur de la provincia de Buenos Aires. Con el paso del tiempo se transformó en el escenario de la primera competencia en la que participó Fangio, dos veces Campeón del TC argentino y cinco veces Campeón Mundial de Fórmula 1.
Muchas fechas recuerdan al 'Quíntuple' en su dilatado camino deportivo. Pero esta fecha es muy especial ya que tiene connotaciones diferentes de las demás.
Mi abuelo 'Tito' me había contado muy por arriba la historia de esa carrera de la que fue testigo y de la que muchos en el pueblo se acuerdan todavía. Un caso singular es el de Don Roberto Moscardi que con sus 101 años en su taller de la avenida Sáenz Peña de Benito Juárez todavía sigue recordando aquella polvareda y el debut de Fangio.
Pero en realidad fue mi padre, Eduardo, quien una vez me contó que en Juárez se estaba preparando un homenaje a Juan Manuel Fangio por los 50 años de su debut en una carrera que se hizo cerca del cementerio. Fue entonces que descubrí lo que realmente significaba en la historia de mi ciudad y en la historia del automovilismo semejante acontecimiento.
Y fue así que el Club Alumni de Benito Juárez, pionero en realizaciones de automovilismo en ese momento presidido por mi padre, lo homenajeó y Fangio junto con su sobrino 'Juan Manuelito' estuvieron en aquella inolvidable tarde noche en la sede de la avenida Alsina. Fue la ocasión en que el artista 'Tuli' Ferri obsequió en nombre del Club y la comunidad un cuadro pintado a mano que reproducía el momento de la largada de aquel Ford número 19 color azul del seudónimo 'Rivadavia' en la carrera de Juárez. Esa pintura está hoy en el Museo de Balcarce.
Para Fangio fue siempre muy importante el reconocimiento de aquella primera aventura. No lo esperaba. Porque tratándose de un enorme campeón con miles de premios y agasajos, el recuerdo de un grupo de vecinos de una ciudad cercana de lo que fue su primera competencia lo conmovió. Nunca olvidó ese gesto del reconocimiento por los 50 años.
Hoy ya pasaron 82 años de aquel día casi de verano en el que Fangio disputó su primera carrera. Y 32 años de aquella reunión en el Club Alumni. Fangio estaba de traje gris, camisa blanca impecable y disfrutó cada momento y cada foto que algunos rivales de aquella carrera le hicieron llegar. No era época de selfies, ni de historias en Instagram...
Incluso hay una filmación casera en la que se puede ver la multitud tapada en tierra tras el paso de los Ford T y Ford A de las dos carreras que se hicieron en aquel triángulo. Para situarlo hay que ubicarlo en la actualidad con la conexión de dos caminos vecinales detrás del cementerio del pueblo y la Ruta Nacional 3, a la altura del kilómetro 399 antes del primer acceso actual a la ciudad.
Recuerdos imborrables de una época que ya no existe. De la que quedan algunas fotos, alguna grabación y nada más. Todo está en la memoria, en la mente de cada testigo presencial o por experiencias transmitidas de una generación a otra como fue en mi caso.
Hoy vivimos otra realidad. Ayer, con la tecnología de hoy, hubiera sido más fácil. Pero los recuerdos no se agotan en la medida en que se pueden revivir de vez en cuando. Y si bien no fui testigo de aquella recordada jornada de 1936, por lo que me han contado y he leído, es como si lo hubiera vivido. Sin muchas fotos, sin celulares y sin redes sociales, hoy casi indispensables para dejar sellado en imágenes y sonidos cualquier acontecimiento.
El recuerdo, enaltece aún más la figura de aquellos pioneros en carreras sobre caminos de tierra, con autos inseguros, a los que había que domar más que manejar.
Para ellos mi respeto y mi admiración, no solamente para el múltiple campeón sino para todos los vecinos que se animaron a correr en esos caminos y se dieron el gran gusto frente a tanto público y con el respaldo de toda la comunidad.
Aquellos pilotos quedarán en la historia, sin trascendencia, sin nombres, sin títulos. Fueron los que acompañaron a 'Rivadavia' en esa gesta que todavía hoy sigue vigente hace 82 años.
"Nunca una fiesta alguna se vio coronada con un éxito tan extraordinario como la que nos ocupa. Desde horas de la mañana se vieron largas caravanas que concurrían a la pista temerosos de llegar tarde y perder el desarrollo de las carreras" escribió el semanario local.
La carrera del bautismo de Fangio tuvo 23 participantes, la mayoría de Benito Juárez, con presencias de Olavarría, Coronel Bunge, Necochea, Tres Arroyos, Tedín Uriburu, González Chaves, y San Cayetano. Junto con Fangio largó otro balcarceño, Luis Finocchietti con el número 18.
Pioneros, a los que sigo admirando a través del tiempo.
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