Fórmula 1
Todos contra Verstappen
Una vez más Max Verstappen volvió a estar en boca de todos en el paddock de la F1, luego del GP de Bélgica, tras ser protagonista del incidente de la largada que no solo dejó sin chances de pelear por el podio a las Ferrari sino también al propio holandés, y por cerrarle la marcha peligrosamente a Kimi Raikkonen más tarde. Niki Lauda lo mandó al psiquiatra, Toto Wolff dijo que es peligroso, Sebastian Vettel aseguró sus colegas no están contentos con la conducta del piloto de Red Bull y el finlandés criticó su manera de defenderse.
El precoz talento holandés hizo explotar las tribunas del trazado belga. Corrió prácticamente de local y la gran mayoría del público esperaba verlo en el podio. Sin embargo, poco duró la ilusión. Después de una fallida largada, intentó recuperar las posiciones que parecían perderse en manos de las Ferrari. Buscó el lado interno de la primera curva y los autos rojos se le vinieron encima. Los tres se tocaron y perdieron todas chances. Y la polémica se abrió. Aunque no fue lo último, porque más adelante en la carrera, Verstappen cuidó su posición cerrando la línea de marcha para aumentar el fastidio de los de Ferrari y ajenos.
“Estoy de acuerdo con las carreras limpias y las batallas cerradas, pero en mi opinión, lo que ocurrió en Eau Rouge con Verstappen no fue correcto. Iba a toda velocidad y tuve que retroceder antes de la curva 5 porque giró en frente de mí cuando traté de adelantarlo. Nunca he tenido que hacer eso con cualquier otro piloto, si no hubiera frenado duramente lo habría golpeado a toda velocidad y habría terminado en un accidente enorme”, opinó Raikkonen sobre su encontronazo con el de Red Bull.
Vettel prefirió enfriar la situación sin ocultar el malestar con el holandés: "Intenté hablar con Max , pero después de la carrera no es el momento. Intentaré hablar con Max, no hoy porque creo que ha tenido un mal día. Yo no tuve un buen día y Kimi no tuvo un buen día. No soy un gran fan de penalizar a la gente. No es el modo de educar. Necesitamos hablar entre nosotros y tener respeto. Creo que ha habido un par de maniobras con las que el resto de la parrilla no está contenta. El mejor modo de educar es hablar entre ambos para que los medios hablen de ello e intentar promoverlo por otros canales. Somos hombres y es mejor hablar uno delante del otro. Creo que criticar es correcto, pero creo que es incorrecto crear una historia a raíz de esto. Creo que es agresivo y ese es su fuerte, pero ciertos movimientos, especialmente en frenada, no son correctos. Tiene que entender que en carrera se está jugando mucho y no es lo más inteligente".
Las críticas más duras vinieron llamativamente del lado de Mercedes, a pesar de no haber estado involucrados en las polémicas. Lauda fue al hueso: “La crítica de Kimi estaba plenamente justificada y él (Max) necesita un psiquiatra si dice que fue culpa de Raikkonen. El joven es el talento del siglo, pero si no entiende que hace algo mal, voy a hablar con su padre Jos para decirle que debe hablar con su niño. Está muy por encima del límite”.
También Wolff se encargó de apuntar contra el joven talentoso: “Es brillante para mí. Es un chico que me gusta mucho. Viene aquí sin miedo, sin respeto, pone los codos hacia afuera. Me recuerda a los grandes, a Lewis, a Ayrton Senna. Se puede ver que algunos empiezan a pensarse dos veces sobre cómo adelantarlo. Hasta ahora, todo lo que ha demostrado está en el camino correcto. La FIA no lo ha penalizado, lo único que ha sucedido es que se le ha dado duro en las reuniones de los pilotos. Quizá la próxima vez lo tendrá más difícil. Me temo que podría terminar en gran medida junto al muro un día. Es brillante, pero peligroso”.
El jefe de equipo de Red Bull, Christian Horner, salió a respaldar a su piloto: “Me sorprende que Toto (Wolff) comente algo que no tiene nada que ver con él. Los pilotos tienden a arreglar estas cosas en el circuito. Fue sin duda al límite. Sin embargo, los comisarios no vieron ninguna razón para iniciar una investigación. La FIA no le castiga, pero tendrá que soportar una reunión muy difícil en Monza”.