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Un McLaren para no pasar desapercibido
La subasta realizada el pasado fin de semana en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach, California, mostró al público presente vehículos únicos, presentaciones de prototipos (BMW Z4 Concept o Infiniti 9) y la presencia de modelos muy extrovertidos como el Mclaren 720S.
El modelo de Woking se caracterizó por la extravagante tonalidad fucsia que luce en su carrocería acompañado de un interior de cuero blanco. Este 720S no es fruto de la imaginación de los diseñadores de McLaren, sino que surgió por pedido expreso de un cliente.
En este caso, su orgulloso propietario es el empresario norteamericano Michael J. Fux, dueño de una gran colección de automóviles. McLaren Special Operations (MSO), división encargada de cumplir los deseos de los clientes de McLaren, llevó a la realidad el pedido del dueño.
El color, denominado "Fux Fuchsia", fue creado para el empresario por Rolls-Royce y posteriormente fue rediseñado por MSO. Se usó el mismo tono fucsia en las ruedas, en partes del interior de las puertas, en una parte del volante y en el espejo retrovisor.
Además, para garantizar su exclusividad, McLaren conservará los derechos exclusivos de la tonalidad para cualquier otro vehículo de McLaren que éste adquiera.
McLaren no ha revelado cuánto costó el modelo con todos estos toques personalizados.
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El McLaren 720S no sufrió ninguna otra modificación. Mantiene el propulsor de 8 cilindros en V sobrealimentado por dos turbos y prestaciones para el infarto: 720 CV, 770 Nm, 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y una velocidad máxima de 341 km/h.
Esta no es la primera vez que Fux solicita algo así a McLaren, ya que el estadounidense es propietario de un 12C naranja, un 12C Spider morado y un P1 verde.