Otras
Vehículos autónomos en China: fundamentales contra el brote de Covid-19
La lucha contra el COVID-19 parece larga, aunque desde el otro lado del mundo, en Asia, origen del foco, ya se empiezan a ver signos de que hay luz al final del túnel. En China, donde se comenzó el brote ya han pasado el pico de contagio y los casos que se registran cada día son menos, mientras que Corea del Sur, otro de los países originariamente más golpeados ha sido desde hace semanas un ejemplo de como actuar para frenar el coronavirus.
¿Cómo han logrado corregir la situación? Hay muchos factores pero uno de los más relevantes sin duda ha sido el uso de la tecnología para seguir la máxima de evitar en la medida de lo posible en contacto humano. Y es que especialmente China ha sacado réditos utilizando su tecnología autónoma en vehículos para realizar tareas tan determinantes en una situación de emergencia como esta como repartir productos de primera necesidad, desinfectar y vigilar las calles e incluso controlar la temperatura de sus ciudadanos.
Una tecnología que en Argentina está muy acotada
Esto se ha logrado con vehículos como esta compacta furgoneta de reparto sin conductor de una startup china llamada Neolix que se está viendo abrumada por la demanda de unidades en medio de esta crisis, registrando más de 200 pedidos en los últimos dos meses según relata Bloomberg. Este simpático vehículo permite reducir al mínimo en contacto físico en las entregas de productos de primera necesidad al mismo tiempo que evita tener que recurrir a conductores humanos que pueden ahorrarse riesgos de contagio o bien están sometidos a cuarentena.
Pero este vehículo no solo sirve para entregar productos o suministros médicos (de hecho ya ha servido para llevar material a los hospitales de Wuhan), sino que también se utiliza ya para desinfectar las calles. La situación es tal que el mismo gobierno de China está incentivando la compra de esta clase de furgonetas y ya se maneja una previsión de 1.000 unidades vendidas este año. Incluso Estados Unidos ha iniciado los procedimientos para permitir el uso de vehículos de reparto similares como el modelo Nuro en el país americano.
Pero también esta clase de robots también se están empezando a utilizar en otros espacios más cerrados. Otras máquinas más compactas ya permiten distribuir comida dentro de los hoteles o incluso desinfectar vagones y otros espacios públicos que pueden ser focos de contagio sin necesidad de que un humano tome riesgos de más, como muestra este pequeño robot en Hong Kong. Un modelo que capaz de pulverizar incluso en zonas que no tan accesibles con una limpieza manual.
A todos estos aliados robóticos se suman por supuesto unos conocidos cada vez más populares, especialmente en lugares como China: los drones. Algunos encargados de hacer el trabajo que estos días hacen las autoridades en España, vigilando calles y alertando de posibles ciudadanos que se estén saltando la cuarentena, para lo que cuentan incluso con altavoces para advertirles que vuelvan a casa o se pongan las mascarillas, mientras que otros incluso permiten analizar la temperatura de cada persona en tiempo real.
Queda claro que en muchas ocasiones como esta no hay mal que por bien no venga. Y si estos días hemos visto cómo se han empezado a impulsar en nuestro país soluciones como el trabajo en hogares para quedarnos en casa con el objetivo de evitar más contagios, esta necesidad también va a forzar que en ek futuro los vehículos autónomos reciban un importante impulso que servirá y mucho no solo en estos días tan extraños, sino también en el futuro que llegará después. En especial en nuestro país, que todavía mira de reojo a las nuevas tecnologías en el área de movilidad y autonomía.