TC2000 eSport
Gómez y Honda, tricampeones, en un final polémico
Una vuelta final a puro llanto y un banderazo que desató un desahogo profundo para Juan Manuel Gómez, que soltó el volante de su simulador por primera vez luego de doce vueltas electrizantes al circuito de Road America, para mostrar los tres dedos y gritar: “Tricampeón!!!”.
El Flow e-Racing Championship tiene un nuevo campeón. En realidad, un conocido consagrado. El simracer oficial del Puma Energy Honda Racing logró su tercer título al hilo en el Súper TC2000 esport. No sin antes sufrir. Es que fue una fecha final con dientes y puños apretados. Con la respiración contenida. Y con un desenlace para el debate.
Se dio lo que se esperaba en la última fecha del campeonato. Un mano a mano áspero entre los grandes referentes del torneo de automovilismo virtual más competitivo y profesional de la Argentina. Los dos bicampeones se jugaban mucho más que los jugosos premios. Mucho más que un campeonato. Era una cuestión de honor. Una batalla de estilos. El desempate para dos bicampeones que prácticamente no habían tenido hasta acá un mano a mano tan decisivo como el que protagonizaron en la pista norteamericana.
Y ambos exhibieron una enorme jerarquía, para demostrar por qué son considerados los mejores simracers del país. Fue una carrera de alto voltaje. En las primeras vueltas se metió en la discusión Julián Baptista (Puma Energy Honda Racing), que si bien parecía jugar para su compañero, también buscaba su posibilidad concreta de consagrarse.
También se mezclaron en la batalla Joaquín Jaunarena (CHEVROLET YPF) y el brasileño Lucas Werle. Santino Daventini (Renault Castrol E-Team) largó tercero, aunque eligió arriesgar con la elección de los neumáticos inversa a la de sus rivales y no salió como lo esperaba. Las primeras vueltas fueron con maniobras al límite. Con los autos al filo de la pista. Con toques que fueron descartando de a poco a los animadores.
Baptista quedó eliminado luego de engancharse con el Chevrolet de Lezaeta en una acción áspera de ambos. A partir de allí, comenzó una persecución por el triunfo y el campeonato. Con la lluvia como invitada de lujo. Las cartas estaban echadas. Gómez y Lezaeta peleaban con gomas lisas en un asfalto complicado.
A tres vueltas del final, Lezaeta recortó la diferencia y fue al ataque. El Honda cerraba los espacios. Hasta que una oportunidad pareció abrirse y el Cruze oficial se zambulló. Los autos se aplaudieron en el frenaje de una curva hacia la izquierda. El de Gómez se cayó de la pista y la punta cambió. El campeonato parecía sentenciado a favor del Chevrolet. Sin embargo, poco tardó en llegar la indicación de los comisarios deportivos. Lezaeta debía devolver la posición por maniobra ilícita.
Si bien hubo una vuelta más de acción e intentos más tibios de Lezaeta por volver a buscar la punta, Gómez tuvo una última vuelta tranquila. La única de la carrera. Lo suficiente para completar los más de 6 kms finales con lágrimas en los ojos. Para liberar las presiones. Para aflojar las tensiones de una carrera para el infarto.
Gómez festejó. Lezaeta quedó con una profunda sensación de injusticia y enojo por una maniobra que consideraba válida y que definió un campeonato. Por una decisión que quedará para el debate. Juan Manuel Gómez es tricampeón. Y Honda también, al quedarse una vez más con el campeonato de equipos. “Fue un gran desahogo… fue muy importante para mí ganar este torneo”, reconoció el simracer de 22 años, de Liniers, que también corre en el campeonato oficial del Mundial de Turismo virtual.
El Flow e-Racing Championship tendrá un mes de descanso. El 25 de junio se abrirán nuevamente los servidores de Autódromo Virtual para comenzar con la preclasificación para la primera fecha del Campeonato Regular, que iniciará el 11 de julio en el circuito de Rafaela con chicanas.
Resumen de una final caliente:
