Fórmula 1
¿Para donde irá la F1?
La pérdida de interés de los aficionados del automovilismo por la Fórmula 1 preocupa a los integrantes del gran Circo y, sobre todo, a Bernie Ecclestone y a la FIA, que ven como caen las audiencias y pierden dinero. Esto tiene que ver con que las carreras se hacen cada vez más aburridas debido a la falta de competitividad entre equipos.
Por ello la Asociación de Pilotos de Gran Premio (GPDA), presidida por Alex Wurz y dirigida por Jenson Button y Sebastian Vettel, ha lanzado junto a los demás pilotos de la Fórmula 1 y a Bernie Ecclestone, una encuesta a los aficionados de la F1 de todo el mundo con el objetivo de recoger opiniones y analizarlas para mejorar en un futuro.
En la encuesta se pregunta a los fans como ven las carreras, su forma de seguir la F1, la asiduidad con la que asisten a los Grandes Premios y por cómo ven los métodos de pago para ampliar la oferta informativa sobre la categoría. La encuesta revela que la mayor parte del público considera a la Fórmula 1 cara y aburrida.
Más de 215.000 aficionados de 190 países participaron, expusieron sus ideas y sugerencias en la encuesta que la GPDA realizó sobre el futuro de la Fórmula 1.
Según los resultados dados a conocer, el 89 % de los encuestados opinó que le gustaría más competencia, y no un monopolio de la escudería Mercedes.
Además, un 68 por ciento evaluó que los presupuestos de los equipos son muy altos y ponen en riesgo el futuro de la máxima. Asimismo, el 85 % consideró que se debería tener más en cuenta a los seguidores y el 74 % reclamó una mayor diversidad en materia tecnológica.
Como posibles medidas para hacer más atractiva la Fórmula 1, el 80 % de los fans se pronunció en favor de que haya más de un fabricante de neumáticos, y el 60 % aprueba que se vuelva a introducir la recarga de combustible en carrera.
La encuesta fue lanzada a fines de mayo durante el Gran Premio de Mónaco, y los resultados serán puestos a disposición de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) y a las escuderías.
La Fórmula 1 atraviesa un momento de crisis en los últimos tiempos, con la mitad de los equipos en problemas financieros y un interés que ha decaído en Europa, uno de los mercados más tradicionales de la competencia.Por ello, los directivos de la Fórmula 1 están debatiendo un cambio de reglamento que entrará en vigor en principio en 2017, aunque podría ser adelantado a 2016.